La ITV es la inspección técnica de vehículos que garantiza que cuentan con las condiciones de seguridad exigidas para circular por la vía pública. Las tarjetas de ITV se convierten, por tanto, en un documento obligatorio para circular ya que acredita, no solo la identidad del vehículo, sino que cuenta con la homologación necesaria para circular por nuestro país.
Según los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) un 28% de los accidentes que tuvieron lugar en España durante el 2021 se produjeron como consecuencia de algún problema mecánico. En este sentido, la ITV garantiza que el vehículo está en perfecto estado y no supone ningún riesgo ni para nosotros ni para el resto de usuarios de la vía.
No obstante, a pesar de su obligatoriedad son muchos los vehículos que circulan sin pasar la ITV. Según el último informe de la Asociación Española de Entidades Colaboradoras con la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos (AECA-ITV) más de nueve millones de vehículos circulan por las carretas sin la ITV en vigor, lo que supone el 35% de la flota, es decir, casi cuatro de cada diez vehículos.
Sanciones por no pasar la ITV
Circular sin pasar la ITV es un hecho constitutivo de sanción que podrá variar en función de la gravedad de la infracción. Así, por ejemplo, en caso de que el conductor haya pasado la inspección pero no lleve la pegatina acreditativa obligatoria la sanción puede ser de hasta 100 euros.
En caso de que el conductor circule con la ITV caducada la sanción puede ser de hasta 200 euros. Si además de ello la sanción se considera grave puede ir acompañada de la retirada de 3 puntos del carnet. Para aquellos casos en los que el tiempo transcurrido desde la caducidad de la inspección sea superior al año, la sanción puede alcanzar los 500 euros.
Homologaciones en la ITV
En ocasiones podemos incluir algún elemento o hacer algún tipo de modificación en nuestro vehículo que requiera homologación. Se trata de un paso previo para obtener la autorización que garantiza que el vehículo está en perfectas condiciones para poder circular. Se trata de un trámite necesario ya que sin él no se podrá obtener un resultado positivo en la ITV.
El proceso puede llegar a ser un tanto “tedioso”. Por este motivo, cada vez más empresas incluyen servicios para ayudar a los clientes. Así, por ejemplo, las homologaciones ITV de IMD Ingeniería el equipo de profesionales expertos en homologación trabajan para conseguir la autorización que requiere el vehículo en cuestión.
Este tipo de autorizaciones se requieren para cualquier tipo de reforma que suponga una modificación sobre el vehículo o que cambie las características del mismo.
Un ejemplo muy común de reforma que requiere homologación es la instalación de la bola de remolque. Se trata de una instalación considerada como “reforma importante” por lo que es fundamental contar con esta autorización. Otros ejemplos pueden ser la modificación del tubo de escape, la sustitución del parachoques o incluso la adaptación del vehículo para personas con movilidad reducida.
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